Animo apacible, tibio y menos inseguro. Fué un fin de semana de esos. De esos donde por alguna razón y contra todo pronóstico, todo sale biem.
Desde el té de jazmín el viernes hasta el té en bolsa de hoy, todo ha estado bien. Me recuerda que la felicidad son los momentos y no otra cosa: La risa en el metro, escuchar las 45682 versiones distintas de Message in a Bottle en mi MP3, que me inviten a almorzar, comprarme un vestido en $300, que el café del Doggi`s sea bueno, que caminar a las doce de la noche por parque Bustamante sea divertido, que mis ideas aún funcionen en forma creativa...que a pesar de las inseguridades propias de mi adolescencia tardía, todavía soy capaz de arriesgarme una vez más, a ver que pasa.
Estoy feliz de no estar sola (mención especial a mi Mamá, Mario, Camila, Diana, Pali, Angela y Alvaro casi como artista invitado). Gracias a Dios, esta oveja con piel de lobo, una vez más tiene ganas de seguir caminando al sol.
1 comment:
MMM traté de entrar a tu blog y me dice k solo haceptas personas invitas, en fin, cuidate mucho, besos
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